La siguiente declaración ha sido emitida por:
American Hospital Association
American Medical Association
American Nurses Association
Como proveedores de salud, estamos críticamente conscientes de la importancia de mantener la estabilidad del suministro de sangre y productos sanguíneos para salvar las vidas de nuestros pacientes. La pandemia del COVID-19 plantea retos actuales para las organizaciones que han reforzado nuestro suministro de sangre—tales como empresas comerciales, lugares de culto, y universidades—por el alojamiento de las campañas de donación de sangre. Durante el año pasado, a medida que recuperábamos los retrasos de procedimientos y cirugías, tratábamos a pacientes con trauma, y cuidábamos a las personas que necesitan transfusiones, la necesidad de sangre ha aumentado mientras que las donaciones han sido consistentemente bajos debido a las altas tasas de COVID-19 y escasez de personal.
En este momento, estamos enfrente de una crisis nacional—la peor escasez de sangre en más de una década, según la Cruz Roja Americana.
La gravedad y duración de esta escasez podría peligrar nuestra capacidad como proveedores de salud para satisfacer la demanda de nuestros pacientes y comunidades.
Instamos a las personas elegibles que vengan a donar sangre. La donación de sangre es seguro y fácil. Nos sumamos a los llamados a la acción para donar, y esperamos que muchas de las citas que están disponibles se llenen pronto. Sin embargo, pedimos a los donantes que no se preocupen si no hay una oportunidad de donar inmediatamente; la necesidad de sangre sigue siendo importante.
Siempre habrá una necesidad de sangre en el sistema de salud, y atender esta necesidad requiere donaciones consistentes para reponer y mantener un suministro de sangre suficiente. Con donaciones recurrentes, tenemos más confianza en nuestra habilidad de satisfacer las necesidades médicas y poder salvar las vidas de usted, sus seres queridos, o sus vecinos en casos de emergencia.
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About the American Medical Association
The American Medical Association is the physicians’ powerful ally in patient care. As the only medical association that convenes 190+ state and specialty medical societies and other critical stakeholders, the AMA represents physicians with a unified voice to all key players in health care. The AMA leverages its strength by removing the obstacles that interfere with patient care, leading the charge to prevent chronic disease and confront public health crises and, driving the future of medicine to tackle the biggest challenges in health care.
